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Es todo. Dos palabras.
Si eres independiente, esa es la parte difícil. La parte importante. La parte que abrirá la puerta hacia el trabajo que buscas hacer.
Los clientes mejores te retan. Te apoyan. Hablan de tí. Pagan a tiempo. Pagan más y esperan más.
Si eres independiente, esa es la parte difícil. La parte importante. La parte que abrirá la puerta hacia el trabajo que buscas hacer.
Los clientes mejores te retan. Te apoyan. Hablan de tí. Pagan a tiempo. Pagan más y esperan más.
Todo lo demás se va a arreglar solo si te enfocas en tener mejores clientes.
Es posible pero, cuidado, improbable, que los mejores clientes simplemente aparezcan. Que desconocidos se den cuenta de lo duro que estás trabajando y lleguen. Pon atención, aunque parezca injusto, sucede que no obtienes clientes mejores simplemente por trabajar más duro.
En lugar de eso, es mucho más productivo tomar los pasos necesarios para atraerlos y mantenerlos.
