Para llegar a ser el capitán del equipo de tu ciudad hay que currárselo bastante. Si no que se lo digan a Manu García ( @ManuGarcia19), capitán del @Alaves . Sus inicios, pero sobre todo su paso por la Regional Preferente. Algo no tan común en un jugador de Primera.

Todo empezó en su colegio de Vitoria. Aprovechando que el San Viator estaba convenido con la Real Sociedad, los técnicos de la cantera Txuri-urdin deciden llevarlo a probar cuando era infantil de segundo año.

Tras pasar el corte, Manu García ficha finalmente por la Real Sociedad como cadete de primer año, en la temporada 2000-2001. En Zubieta va quemando etapas hasta llegar la temporada 2004-2005, el último año de juvenil. ¿Qué pasó después?

En el verano de 2004 la Real Sociedad decide incorporan un club más a su estructura. Digamos que un símil al que tiene el Athletic Club con el Baskonia. En resumen, nace una "Real Sociedad C". Pero a diferencia de lo que hizo hace unos años con el Berio en este caso fue la UPV.

Uno de los elegidos para formar parte de esa plantilla es Manu Garcia, que aún le restaba un año de juvenil.
Pero...¿qué es la UPV? ¿Cuántos años estuvo asociado con la Real Sociedad? ¿Donde jugaba? ¿Quién jugaba? Allá vamos.

El UPV era el equipo de la Universidad Pública del País Vasco. Pese a que la sede principal está en Vizcaya, el club nace a partir del Campus de San Sebastián. Concretamente nace a partir de la Facultad de Derecho donostiarra en 1982.

Pese a que en muchos sitios aparece como fundado en 1986, la UPV ya compitió la temporada 82-83 en la Segunda Regional saliendo campeón. Fue poco a poco ascendiendo hasta debutar en Tercera en la temporada 95-96. En aquella época jugaba Oier Larrainzar, mítico del Real Unión.

Pero no es hasta 2004, con el equipo en Preferente, cuando entra totalmente en la órbita de la Real. Si cabe destacar, que en la temporada 2001-2002 el delantero del equipo fue un clásico como Gorka Brit que también había salido de la cantera de Zubieta.

Aquella temporada, Manu García junto a la mayoría de la generación del 86 pasan de los sintéticos de la División de Honor Juvenil al barro de la Preferente Guipuzcoana. Para llegar a Primera hay sufrir en invierno en Mutriku.

El encargado de dirigir a aquella hornada de chavales fue José Luis Ribera, ex-jugador del Real Burgos, Sestao o Deportivo, y que la temporada anterior había entrenado al Éibar en Segunda División.

Por aquella UPV además de Manu García, pasaron durante esa temporada jugadores como Aritz Borda, Toño Ramírez, Ion Zubillaga, David Zurutuza, Ion Txoperena, Ximun Duhour, Math Gomes, Txusta, Mikel González o Carlos Martínez.

Uno de los cambios fue el de la indumentaria. La UPV abandonó el blanco y negro para jugar por completo de rojo. La segunda equipación sería verde y la ropa de calentamiento y entrenamiento sería directamente la de la Real Sociedad. Además de por supuesto jugar en Zubieta.

La temporada no sería nada fácil para aquellos chavaletes que se enfrentaban cada fin de semana a veteranos de equipos como el Touring, Mondragón, Trintxerpe, Zestoa, Hondarribia o Urola. Aún así, llegaron con opciones de campeonar a la última jornada.

El 29 de mayo de 2005 el UPV tenía 78 puntos frente a los 80 del Tolosa y se enfrentaban entre ellos. Finalmente y con un árbitro poco casero, el Tolosa venció 1-2 en Zubieta y al UPV le tocó jugarse el ascenso en una liguilla contra el campeón vizcaíno y alavés.

Ahí llegaría el primero de los cuatro ascensos que atesora Manu García. La UPV vencería 4-0 al Lantarón y 2-1 al Getxo, logrando así el ansiado y sufrido ascenso a Tercera. Algo que abriría las puertas del Sanse a muchos de ellos para la siguiente temporada.

La siguiente campaña, con Manu ya en el primer filial Txuri-urdin, la UPV mantuvo la categoría en Tercera con jóvenes como Rodellar, Iosu Villar, Esnaola, Txusta, Iturrioz, Beobide o Lander Gabilondo. En esta ocasión ya con el escudo de la Real sobre la equipación roja.

Ese verano de 2006 se rompería el acuerdo entre la UPV y la Real Sociedad. Ésto provocó la caída libre del club, pese a asociarse entre 2007 y 2010 con el CD Vasconia del barrio de Amara. Finalmente desaparecerían tras descender a Primera Regional en 2010.

El camino de Manu hasta llegar a Primera no fue ni mucho menos fácil. Pese a que en su debut con la Real Sociedad B lograrían jugar el Play-Off junto a Castillo, Carlos Martínez, Agirretxe, Díaz de Cerio, Elustondo, Zurutuza, Mikel González o Dani Estrada.

Tras marcar 10 goles en su 3ª temporada en el Sanse, el Real Unión le dio la oportunidad también en 2ªB. En Irún hizo otros 8 goles y consiguió el ascenso a Segunda.
Pero aún quedaba mucho por luchar. No renovó y se fue al Eíbar con el mismo objetivo, el ascenso a Segunda.

En Éibar disputó el Play-Off, hasta que el Ontinyent les bajó del sueño. De esta forma se tuvo que buscar la vida en la UD Logroñés, a la espera de lograr otro ascenso que le acercara al fútbol profesional. Aquel año en Preferente le curtió lo suficiente para seguir intentándolo.

Con 26 años recibió la llamada del Deportivo Alavés, el equipo de su ciudad en el que nunca había jugado. Quizá pareciera tarde ya para soñar con Primera, más aún en un Alavés que llevaba 4 años deambulando por la B.

Se hizo un indiscutible en el Alavés 2012-2013, primero como lateral zurdo, y cumplió por fin el sueño. El Alavés ascendió a 2ª División como campeón y Manu tuvo la oportunidad de debutar la siguiente temporada en el fútbol profesional.

Pero todavía quedaba un peldaño por subir. En la temporada 2015-2016, con Bordalás en el banquillo, y como pieza angular en el equipo lo logró. El Alavés volvía a Primera el 29 de mayo gracias a un gol de Manu García al Numancia. Parecía el final perfecto, pero aún quedaba más.

Manu debutaría en Primera en el Vicente Calderón con 30 años. Para darle más épica a su carrera hasta la élite, marcaría el gol del empate en el minuto 95.
Desde entonces se ha convertido un fijo en el centro del campo del Alavés, llegando a disputar la final de Copa en 2017.

Un buen ejemplo de cómo hay que currárselo para llegar a jugar en Primera. Pasar por el barro de Preferente, subir a Segunda y no continuar en la plantilla, llegar a un Glorioso en horas bajas para acabar llevándolo a Primera. Ése fue el camino de Manu García.

Con 34 años sigue siendo un fijo en el equipo, del que era socio desde pequeño.
En el plano personal aún tiene algún récord a tiro. De momento es el tercer jugador con más partidos oficiales como babazorro con 278.

Concretamente se encuentra a 68 partidos de Astudillo y a 17 de Pablo Gómez. Esta temporada había pasado a Juan Gorospe que disputó 269 entre todas las competiciones. Sin olvidar los 19 goles que ha marcado con el Alavés y su fichaje express por el Girona en 2008.

Da igual jugar en el barro de Preferente que en la alfombra del Bernabéu. Las oportunidades llegan y se aprovechan. Aún le quedan más capítulos por escribir.¿Quién sabe? Un vitoriano sea el jugador con más partidos en el Alavés.
Muchas gracias a @ManuGarcia19 por su colaboración.