¿CÓMO SE COMBATE UNA DICTADURA?

Abro hilo sobre prácticas no violentas que la ciudadanía puede implementar para desgastar, debilitar e incluso derrocar una dictadura.

Lo que expongo aquí no es ocurrencia mía, sino una síntesis de lo que propone Gene Sharp en su libro "De la Dictadura a la Democracia", cuya versión en PDF pueden descargar, legalmente y de forma gratuita, de https://www.aeinstein.org/wp-content/uploads/2013/09/DelaDict.pdf

Se trata de principios y estrategias de resistencia no violenta que tuvieron gran influencia, por ejemplo, en la caída del dictador servio Slobodan Milosevic, o la serie de levantamientos conocidos como la "primavera árabe".

¿A quiénes NO LES GUSTA ESE LIBRO? Por ejemplo, al gobierno iraní, que acusó a Sharp de ser operador de EEUU (¿les suena?). O a Hugo Chávez, que lo consideró una amenaza a la seguridad nacional.

No podía quedar fuera de la lista Cristina Kirchner, quien dijo, palabras más, palabras menos, que se trataba de estrategias promovidas por el imperialismo para derrocar a los gobiernos populares a través de "golpes blandos".

Antes de avanzar en el tema, hay dos cosas que quiero aclarar. La primera: ¿estamos, los argentinos, viviendo en una dictadura?

La respuesta es NO. Este autoritarismo pedorro que padecemos NO ES UNA DICTADURA.

Celebramos elecciones democráticas hace 7 meses, y nada indica que no volveremos a tenerlas el próximo año; tenemos una división de poderes de pobrísima calidad, pero existente aún; no hay censura formal a la prensa; tampoco presos sin intervención judicial.

Llamar "dictadura" a algo que no lo es nos perjudica. Para empezar, nos quita credibilidad. Nos pone en el lugar de delirantes cazadores de conspiraciones, o de una oposición chillona y sin argumentos (¿cuántas veces los escuchamos decir "Macri dictadura"?).

Además, al banalizar el término, lo vaciamos de contenido. Si todo es dictadura, entonces nada lo es. Ya lo vivimos con "represión", con "genocidio", con "desaparecidos". Sobreactuar dictadura debilita a la Democracia.

Finalmente, nos expone a terminar como el pastor mentiroso (otros lo conocen como "Pedro y el Lobo"): la gente que hoy se asomó y vio que el lobo no estaba, directamente va a ignorar toda advertencia cuando esté realmente acá.

Y esto me lleva a la segunda cosa que quiero aclarar: ¿hay motivos para suponer que este gobierno puede virar hacia una dictadura? SÍ. Sí los hay.

Hay que ser necio, ciego o ignorante para negarlo. Veamos:

Hay una clara tendencia hacia la concentración de poder. AÚN ANTES DE LA PANDEMIA, el kirchnerismo sancionó una ley de emergencia económica que otorgaba facultades extraordinarias al presidente, que, de paso, se siente muy cómodo gobernando por DNU.

Por otro lado, el valor que le asignan a las instituciones democráticas quedó más que demostrado cuando las ferreterías fueron consideradas actividades esenciales, mientras que el Congreso y la Justicia permanecieron cerrados (y sin apuro oficialista por abrirlos).

Tampoco podemos ignorar, como señal, el afecto que el kirchnerismo profesa a las dictaduras: desde Cuba y Venezuela hasta Angola, pasando por acuerdos con Irán y cesión de territorios a China.

Si a esto le sumamos condimentos como la promesa de Peñafort a la Corte de lograr sus objetivos "con razones o con sangre", los intentos de control social como la app CuidAR o los "retos" presidenciales a tuiteros y periodistas, la tendencia es clara.

Finalmente, una mirada a sus proyectos futuros: reforma judicial y participación estatal en las empresas que reciban ayuda por la pandemia.

Va de nuevo: ¿Estamos en una dictadura? NO; ¿Quieren llevarnos a una? Si no es así, lo disimulan bastante.

Así las cosas, vale la pena repasar algunos de los principios y técnicas de resistencia no violenta que Sharp propone. Ojalá el gobierno permanezca del lado democrático de la vida y esto no sea más que un ejercicio de imaginación...

Basta de preámbulos. Vamos a lo nuestro.

Lo primero que se necesita, a la hora de enfrentar una dictadura, es comprender de dónde deriva el poder.

LOS DICTADORES NO PUEDEN GOBERNAR SIN AYUDA DE LOS GOBERNADOS. ¿Cómo logran su cooperación? Veamos:

Por ejemplo, cuando te dicen que en Venezuela hay democracia, porque hay elecciones, hablamos de AUTORIDAD. Existe en muchos la convicción de que el gobierno es legítimo, aún cuando es una dictadura.

Cuando se genera dependencia económica en gran parte de la población, se utilizan recursos materiales para comprar apoyo; al mismo tiempo, la amenaza de quitar la ayuda estatal, de la que muchos dependen, opera como sanción.

Dentro de los intangibles, el poder de una hipotética dictadura podría provenir de nuestra cultura (Argentina es un país paternalista), del imaginario popular (nadie puede garantizar gobernabilidad más que el peronismo), o del contexto (miedo al Coronavirus).

Por suerte para nosotros, el campo de conocimientos y destrezas está desierto: es tal la ambición, la paranoia y la pasión por el nepotismo de los kirchneristas, que jamás han puesto otra cosa que inútiles acomodaticios en puestos clave.

Identificar las fuentes del poder de una dictadura es fundamental para debilitarla y, eventualmente, derrumbarla. Más aún, en escenarios pre-dictatoriales como el nuestro, actuar con premura para impedir que accedan a ellas es crucial.

Así como se debe privar a una dictadura de sus fuentes de poder, es necesario defender las propias. LA PRINCIPAL AMENAZA PARA UNA DICTADURA SON LAS INSTITUCIONES LIBRES DE LA SOCIEDAD DEMOCRÁTICA: partidos políticos, universidades, sindicatos, clubes, ONGs, familia.

Una dictadura buscará cooptar, controlar o anular esas instituciones. De ahí el interés histórico de nuestros aspirantes a tiranos por librar batallas culturales en las aulas y por sostener a sindicalistas amigos en la dirección de los gremios.

Fortalecer la Democracia implica ocupar espacios de participación comunitaria, no para un partido (no nos convirtamos en lo que combatimos), sino para preservar su independencia. Cada espacio que el kirchnerismo ocupó fue un espacio que los demás dejamos.

Implica también fortalecer los partidos políticos opositores. Aún con todos sus defectos, son la base de nuestra vida democrática. Esto no significa obediencia ciega ni carta blanca, pero sí paciencia, tolerancia y apoyo.

Otro tanto ocurre con los medios de comunicación: la prensa libre es indispensable para el sostenimiento democrático. Aún cuando muchos le reprochamos al periodismo su inexplicable neutralidad entre el fuego y los bomberos, no hay Libertad posible sin medios privados.

Ya hablamos de limitar las fuentes de poder de una dictadura y de fortalecer los espacios democráticos. ¿Qué sigue? CONOCER Y EXPLOTAR LAS DEBILIDADES DEL ADVERSARIO.

¿Cuáles son las debilidades más comunes de una dictadura? Veamos algunas:

Estas debilidades pueden aprovecharse, e incluso agravarse deliberadamente (por ejemplo, los laberintos burocráticos hacen más fácil ocultar cosas. Es más fácil evadir impuestos en un país con un sistema fiscal rebuscado y complejo que en uno simple).

De nada sirve saber esto si nos vamos a largar a improvisar. Para que la lucha sea efectiva, se requiere PLANIFICACIÓN.

¿Hay ejemplos de acciones espontáneas que resultaron muy bien? Sí, por supuesto. Pero también muchísimos ejemplos de acciones que, por no estar integradas en un plan estratégico, no pasaron de lo anecdótico.

¿Qué nos juega en contra para planificar? Algunos factores son los siguientes:

Si bien, reitero, en Argentina no estamos en una dictadura, muchos venimos trabajando para hacer oposición activa a un gobierno corrupto, autoritario y nocivo... Y seguramente todos tenemos mil anécdotas que ilustran los obstáculos que acabo de listar.

Para cerrar, ¿cómo cuernos se pone en práctica esto de la lucha no violenta, que no sean nuestras gastadísimas marchas y cacerolazos? Sharp propone en su libro 198 MÉTODOS DE ACCIÓN NO VIOLENTA. Menciono 3 o 4 como ejemplo, pero sugiero verlos todos.

Espero que esta información resulte de utilidad para organizar un poco las ideas y empezar a pensar estrategias más allá del idealismo. Estrategias que, espero, no necesitemos poner en práctica.

Por supuesto, se agradece difusión.

P/D 1: Si tienen 50 minutos libres y quieren conocer un poco más sobre las propuestas de Gene Sharp, sugiero ver este documental:

P/D 2: Va de nuevo el link al libro. Lo puse más arriba, pero para que no tengan que buscarlo, lo copio de nuevo acá (¿vieron cómo los malcrío): https://www.aeinstein.org/wp-content/uploads/2013/09/DelaDict.pdf

P/D 3: Escribí "serVio" en lugar de "serBio". ¡Dejame editar, Jack!

Está en el tercer tuit del hilo. No da para borrarlo. Prométanme que, si muero antes que ustedes, este incidente no va a figurar en mi epitafio.