[HILO] La detención de Pinochet en Londres. Primera parte.
El 22 de septiembre de 1998, Pinochet aterrizaba en Londres. Acompañado por su hija Lucía, una pequeña comitiva de seguridad y un médico. En lo formal el Senador Vitalicio iba en una "misión de Estado" y por lo tanto viajaba en condición de embajador plenipotenciario.
En realidad el ex-dictador iba a Londres a un viaje de placer aprovechando la invitación de la Royal Ordnance, productora de armamento. Luego se descubrió que durante 1997 y 2004 le depositaron a Pinochet cerca de 2 millón de dólares en cuentas secretas del Banco Riggs).
Pinochet se alojó en el Intercontinental, un hotel de cinco estrellas ubicado en Park Lane, residencia habitual de millonarios árabes y estadounidenses. Ahí se reunió con el periodista Jon Lee Anderson del @NewYorker, quien estaba realizando un reportaje sobre su persona.
En la publicación (que salió a sólo días antes de su arresto), el periodista describía que, si bien Pinochet estaba de buen humor y que incluso fue al Museo de Madame Tussaud -por novena vez-, no se sentía bien y probablemente tendría que operarse de una hernia.
En Santiago de Chile, el dueño de El Clarín, Víctor Pey, leía una breve noticia que informaba la presencia del ex-dictador en Londres. Decidió entonces comunicárselo a Joan Garcés, abogado español y único asesor de Allende sobreviviente al ataque a La Moneda en 1973.
Aquí puedes leer una breve biografía de Víctor Pey: https://twitter.com/nicolasyanez/status/1214904022915788800?s=20
Durante 23 años, Joan Garcés buscó la manera de llevar a Pinochet a la justicia por delitos de lesa humanidad. Una querella presentada por la Unión Progresista de Fiscales (UPF) contra agentes argentinos por crímenes en Dictadura, fue la llave que estaba buscando.
Luego de dos años de investigación, y pese a intentos de cerrar el caso por parte de ex-militares chilenos, situaciones de extorsión -cómo cuenta Garces- e incluso presiones de la Ministra de Justicia de ese entonces la democratacristiana Soledad Alvear, el proceso avanzó.
El 05 de octubre (fecha en que se conmemora el triunfo del NO), Pinochet se reunió a tomar el té con Margaret Thatcher. La "Dama de Hierro" intercambiaba correspondencia con el Dictador y cada vez que Pinochet viajaba a Londres le mandaba un ramo de flores y una caja de bombones.
Posterior a esta reunión manifestó dolencias. Canceló sus actividades, y si bien no había viajado con ese objetivo sorpresivamente decidió operarse en Inglaterra. Su médico de cabecera le había dado algunos nombres de doctores en caso de que se produjera una emergencia.
Lucía Pinochet le confidenciaba al periodista del @NewYorker su preocupación ya que a la edad de su padre, y con sus antecedentes médicos, "nadie quiere tomar la responsabilidad cuando el paciente es importante". La operación contemplaba tener a Pinochet sedado durante 6 horas.
Luego de reunirse con Farid Afshar, un medico británico de origen persa y una eminencia en lesiones de columna, el Senador cancela su retorno a Chile a pesar de las recomendaciones de su familia y del mismo general Ricardo Izurieta, recién estrenado Comandante del Ejército.
Luego de la operación, Pinochet se hospedó en The London Clinic, un exclusivo recinto con una de las mejores unidades para operación de columna. Si bien superó la operación, se trató con fuertes antibióticos producto de la infección en su herida y aparato urinario.
Posterior a la operación, el martes 13 de octubre, el abogado español Joan Garcés le solicitó a los dos juzgados de la Audiencia Nacional española órdenes para interrogar a Pinochet en Londres y su captura, a efectos de la extradición para ser juzgado en España.
Al día siguiente, uno de estos jueces, Baltasar Garzón, decidió cursar las órdenes, y pidió a las autoridades británicas retener a Pinochet, en ese momento internado en The London Clinic, hasta que se produjera el interrogatorio.
El 16 de octubre, Pinochet dormía ayudado por sedantes y bajo la atenta mirada del Capitán Gana, oficial de menor graduación dentro de la escolta y su médico Andrés Marín, quien abandonó el hospital pasadas las 10:30 de la noche. (fotos a continuación: recreación TVN)
Cerca de las once, el inspector de la sección de extradiciones de Scotland Yard, Andrew Hewitt, acompañado de unos 12 oficiales de policía llegaron hasta la habitación 801, ubicada en el último piso de la clínica, para arrestar a Augusto Pinochet.
Hewitt le informó a Gana que debía abandonar inmediatamente el octavo piso porque desde ese momento Pinochet se encontraba bajo custodia policial. Éste al negarse y al intentar sacar su teléfono celular, los policías lo rodearon, y lo obligaron a abandonar el edificio.
Finalmente a las 23 horas, Hewitt se dispuso a cumplir con su principal e histórico objetivo: arrestar al Dictador. Cerca de las 23:30 horas entró a la pieza y le leyó a un sedado Pinochet los motivos de su detención.
"Habiendo evidencia de que Augusto Pinochet Ugarte, de ahora en adelante "el imputado" es acusado de cometer delito (...) se requiere arrestar al imputado y traerle delante del magistrado metropolitano en el Tribunal Penal de Bow Street".
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